Células ayudadoras foliculares T retienen las características linfoides
Por el equipo editorial de LabMedica en español Actualizado el 19 Aug 2019 |
El sistema FACSymphony A5 es un analizador de células novedoso que aprovecha los beneficios inherentes de la citometría de flujo y permite la medición simultánea de hasta 50 características diferentes de una sola célula (Fotografía cortesía de BD Biosciences).
Las células T foliculares ayudadoras (Tfh) son un subconjunto de células T CD4+, que proporcionan ayuda a las células B dentro de los folículos de los tejidos linfoides secundarios. Las Tfh promueven el cambio de clase de las células B y la maduración de afinidad, y sin la ayuda de Tfh, los centros germinales (CG) no se forman.
Algunas células Tfh en los ganglios linfáticos expresan de manera única la proteína receptora de superficie CXCR5 y la molécula inhibidora PD-1. La sangre contiene algunas células Tfh con estos marcadores; sin embargo, los científicos han debatido durante mucho tiempo si las células Tfh salen de los ganglios linfáticos y circulan en la sangre con rastros de sus marcadores originales.
Un gran equipo de científicos que trabaja con la facultad de medicina de la Universidad de Pensilvania (Filadelfia, Pensilvania, EUA), evaluó los marcadores de la superficie celular de las células Tfh recogidas de los conductos torácicos humanos, los principales, aunque difíciles de acceder, “tubos de drenaje”, que transportan el líquido del sistema linfático al torrente sanguíneo. Para saber cómo las características de las células Tfh en la sangre se conectan con el sistema linfático, el equipo comparó las Tfh de los CG de los ganglios linfáticos con las células Tfh en el líquido linfático y con las de la sangre. Las muestras se analizaron en tres citómetros: LSRII y FACSSymphony A5 para fenotipo, así como un FACSAria II (BD Biosciences, Franklin Lake, NJ, EUA) para el fenotipo y la clasificación.
El equipo identificó consistentemente células Tfh “CXCR5-brillantes PD-1-brillantes” en el líquido linfático en el conducto. Estas Tfh, doblemente marcadas, compartieron muchas características epigenéticas y expresaron proteínas similares con las células Tfh en los CG. Esto significa que las Tfh muestreadas en el conducto linfático son intermedios celulares que conectan la biología de las Tfh en el tejido linfático con las Tfh en la sangre, lo que en última instancia elimina la duda de si las Tfh en la sangre reflejan lo que sucedió en la linfa en el pasado inmediato.
El equipo considera que su capacidad, recién descubierta, de unir muestras de sangre obtenidas con mayor facilidad con eventos inmunes anteriores en lo profundo del ganglio, es clínicamente útil para una variedad de aplicaciones. Desde evaluar cuándo los pacientes están listos para recibir las vacunas después de los trasplantes de médula ósea, hasta medir cómo los tratamientos inmunes de primera línea para personas con enfermedad inflamatoria intestinal (EII) o ciertos tipos de cánceres afectan el sistema inmunológico más amplio; el uso de su nuevo método de “periscopio” abre la puerta para planes de tratamiento más personalizados.
E. John Wherry, PhD, profesor de inmunología y autor principal del estudio, dijo: “Las células que estamos buscando en el torrente sanguíneo son el 0,1% de todos los tipos de células circulantes en la sangre. Pero nuestro ‘periscopio’ nos permite ver lo que ese tipo de células raras nos puede decir sobre los eventos del sistema inmunitario que han sucedido en una parte distante del cuerpo”. El estudio fue publicado el 1 de agosto de 2019 en la revista Journal of Clinical Investigation.
Enlace relacionado:
Facultad de Medicina de la Universidad de Pensilvania
BD Biosciences
Algunas células Tfh en los ganglios linfáticos expresan de manera única la proteína receptora de superficie CXCR5 y la molécula inhibidora PD-1. La sangre contiene algunas células Tfh con estos marcadores; sin embargo, los científicos han debatido durante mucho tiempo si las células Tfh salen de los ganglios linfáticos y circulan en la sangre con rastros de sus marcadores originales.
Un gran equipo de científicos que trabaja con la facultad de medicina de la Universidad de Pensilvania (Filadelfia, Pensilvania, EUA), evaluó los marcadores de la superficie celular de las células Tfh recogidas de los conductos torácicos humanos, los principales, aunque difíciles de acceder, “tubos de drenaje”, que transportan el líquido del sistema linfático al torrente sanguíneo. Para saber cómo las características de las células Tfh en la sangre se conectan con el sistema linfático, el equipo comparó las Tfh de los CG de los ganglios linfáticos con las células Tfh en el líquido linfático y con las de la sangre. Las muestras se analizaron en tres citómetros: LSRII y FACSSymphony A5 para fenotipo, así como un FACSAria II (BD Biosciences, Franklin Lake, NJ, EUA) para el fenotipo y la clasificación.
El equipo identificó consistentemente células Tfh “CXCR5-brillantes PD-1-brillantes” en el líquido linfático en el conducto. Estas Tfh, doblemente marcadas, compartieron muchas características epigenéticas y expresaron proteínas similares con las células Tfh en los CG. Esto significa que las Tfh muestreadas en el conducto linfático son intermedios celulares que conectan la biología de las Tfh en el tejido linfático con las Tfh en la sangre, lo que en última instancia elimina la duda de si las Tfh en la sangre reflejan lo que sucedió en la linfa en el pasado inmediato.
El equipo considera que su capacidad, recién descubierta, de unir muestras de sangre obtenidas con mayor facilidad con eventos inmunes anteriores en lo profundo del ganglio, es clínicamente útil para una variedad de aplicaciones. Desde evaluar cuándo los pacientes están listos para recibir las vacunas después de los trasplantes de médula ósea, hasta medir cómo los tratamientos inmunes de primera línea para personas con enfermedad inflamatoria intestinal (EII) o ciertos tipos de cánceres afectan el sistema inmunológico más amplio; el uso de su nuevo método de “periscopio” abre la puerta para planes de tratamiento más personalizados.
E. John Wherry, PhD, profesor de inmunología y autor principal del estudio, dijo: “Las células que estamos buscando en el torrente sanguíneo son el 0,1% de todos los tipos de células circulantes en la sangre. Pero nuestro ‘periscopio’ nos permite ver lo que ese tipo de células raras nos puede decir sobre los eventos del sistema inmunitario que han sucedido en una parte distante del cuerpo”. El estudio fue publicado el 1 de agosto de 2019 en la revista Journal of Clinical Investigation.
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