Prueba identifica riesgo de linfoma

Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 12 Mar 2014
El sistema inmune es responsable de la eliminación de células B inmunes, cancerosas, en sus etapas iniciales, antes de que se desarrollen en linfomas de células B, también conocidos como linfomas no-Hodgkin.

Las células inmunes sufren cambios espontáneos diariamente que podrían conducir al cáncer, si no fuera por la vigilancia diligente del sistema inmune, y esta vigilancia inmunológica explica la sorprendente rareza de los linfomas de células B en la población, teniendo en cuenta la frecuencia con que ocurren estos cambios espontáneos.

Imagen: Microfotografía de un linfoma grande de células B, de un aspirado con aguja fina de un ganglio linfático (Fotografía cortesía de Nephron).

Los científicos de Instituto Walter y Eliza Hall (Melbourne, Australia) descubrieron que la pérdida de la función del gen supresor de tumores PR que Contiene el Dominio 1, con el Dominio ZNF (PRDM1), también conocido como el gen de la Proteína de Maduración Inducida por los Linfocitos B (BLIMP1) o la expresión mal regulada del oncogén de células B LLC/linfoma 6 (BCL6), producen, en una gran proporción, los casos de linfoma difusos de células B grandes (DLBCL).

La mutación dirigida de cualquiera de los genes en un modelo de roedor conduce únicamente al desarrollo lento y poco frecuente de linfoma maligno y a pesar de la mutación frecuente de BCL6 en las células B activadas de los individuos sanos, el desarrollo de linfoma es raro. Los científicos encontraron que las células T impiden el desarrollo de un linfoma manifiesto y el deterioro de control de las células T genera el desarrollo rápido de una enfermedad tipo DLBCL, que puede ser erradicada por células policlonales T, CB8+, de una manera dependiente de receptores de células T, de receptores de CD28 y del ligando Fas.

David Tarlinton, PhD, un coautor del estudio, dijo: “En la mayoría de pacientes, la primera señal de que algo anda mal es encontrar un tumor establecido, que en muchos casos es difícil de tratar. Ahora que sabemos que el linfoma de células B es suprimido por el sistema inmunológico, podríamos utilizar esta información para desarrollar una prueba de diagnóstico que pueda identificar a las personas en las primeras etapas de esta enfermedad, antes de que los tumores se desarrollen y progresen a cáncer. Ya existen terapias que podrían eliminar estas células B ‘aberrantes’' en pacientes en riesgo, por lo que una vez que se desarrolle una prueba, ésta puede pasar rápidamente hacia el uso clínico”. El estudio fue publicado el 2 de febrero de 2014, en la revista Nature Medicine.


Enlace relacionado:
Walter and Eliza Hall Institute



Últimas Inmunología noticias