Mediciones adicionales de hormonas revelan alto riesgo de preeclampsia
Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 01 Jul 2016
Actualizado el 01 Jul 2016
Una prueba de sangre adicional para las mujeres embarazadas, predice con exactitud cuáles mujeres con alta función tiroidea están en riesgo de desarrollar preeclampsia. Los hallazgos podrían ayudar a identificar a las mujeres con embarazos de alto riesgo y potencialmente evitar el tratamiento innecesario que conlleva el riesgo de anomalías fetales.
La preeclampsia es una condición que se produce durante la segunda mitad del embarazo, en la que las mujeres tienen la presión arterial alta y eliminan proteínas en la orina. Se presenta en un 2% a 8% de los embarazos y, en algunos casos conduce a graves complicaciones para la madre y el niño, incluyendo convulsiones, insuficiencia renal, hemorragia y parto prematuro.
Científicos del Centro Médico de la Universidad Erasmus (Rotterdam, Holanda) midieron las hormonas de 5.153 mujeres durante el embarazo temprano, antes de la semana 18, y encontraron que las mujeres con niveles altos de la hormona tiroidea, pero niveles bajos de hormona gonadotropina coriónica humana (hCG) eran entre tres y once veces más propensas a desarrollar preeclampsia. Uno de los factores de riesgo para la preeclampsia es el hipertiroidismo, que puede ser causado por condiciones médicas tales como la enfermedad de Graves o los nódulos tiroideos tóxicos. Sin embargo, los altos niveles de hCG, una hormona que aumenta de manera natural durante el embarazo, también eleva la función de la tiroides, pero este tipo de hipertiroidismo, relacionado con el embarazo, no presenta un mayor riesgo de preeclampsia.
La combinación de niveles altos-normales de tiroxina libre (T4L) con niveles bajos de hCG de menos de 20.000 UI/L) se asoció con un riesgo 11,1 veces mayor de preeclampsia. La combinación de niveles bajos de hormona estimulante de la tiroides (TSH) con niveles bajos de hCG de menos de 20.000 IU/L se asoció con un riesgo mayor de preeclampsia que oscila entre un riesgo mayor de 9,2 veces para TSH de menos de 0,1 mU/L, a un riesgo 8,7 veces mayor cuando la TSH se encontraba por debajo el percentil 5 y a un mayor riesgo 3,8 veces para TSH de menos de 0,4 mU/L. La combinación de niveles de T4 libre normales-altos y hCG de más de 20.000 o TSH baja y hCG de más de 20.000 no se asoció con un mayor riesgo de preeclampsia.
Los autores llegaron a la conclusión que la medición adicional de la hCG en mujeres con pruebas de función tiroidea, normales a altas, mejora notablemente la identificación de las mujeres con alto riesgo de desarrollar preeclampsia. Esto se puede deber probablemente al hecho de que las mediciones de hCG permiten diferenciar la función fisiológicamente alta de la tiroides, causada por niveles elevados de hCG, de la función fisiopatológicamente alta de la tiroides debido a la producción autónoma y/o anticuerpos de estimulación del receptor de la TSH.
Tim I M Korevaar, MD, autor principal del estudio, dijo: “La mayoría de las mujeres embarazadas tendrán niveles altos de hormona tiroidea debido a un aumento natural de la hCG, en lugar de una enfermedad subyacente de la tiroides, como la enfermedad de Grave o nódulos tóxicos. Los médicos actualmente no buscan la preeclampsia, aunque muchos miden la hormona tiroidea durante el embarazo. Medir la hCG, también, puede ayudar a los médicos a interpretar con más exactitud las pruebas de función tiroidea en las mujeres embarazadas.
“Nuestro trabajo tranquilizará, potencialmente, a la gran mayoría de las pacientes que en realidad no tienen una condición subyacente de la tiroides, ayudando a evitar el tratamiento innecesario”. El estudio fue presentado en el 18º Congreso Europeo de Endocrinología, celebrado del 28 mayo al 31 mayo de 2016, en Múnich, Alemania.