Prueba de cerumen detecta con precisión Parkinson identificando moléculas de olor

Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 22 Jun 2025

Las pruebas actuales para la enfermedad de Parkinson (EP) se basan en gran medida en escalas clínicas y neuroimagen, que suelen ser subjetivas, costosas e inadecuadas para el cribado rutinario. Dado que la mayoría de los tratamientos solo frenan la progresión de la enfermedad, el diagnóstico temprano es fundamental para una atención eficaz. Ahora, investigadores han desarrollado un sistema de cribado novedoso y asequible que detecta la EP a partir de los compuestos orgánicos volátiles (COV) presentes en el cerumen.

Este innovador enfoque de investigadores de la Universidad de Zhejiang (Hangzhou, China) fue el resultado de un estudio para explorar el potencial diagnóstico del cerumen rico en sebo como una fuente más estable y protegida de COV relacionados con el párkinson. La idea se basa en hallazgos anteriores de que la composición del sebo cambia en la EP debido a la neurodegeneración, la inflamación y el estrés oxidativo, lo que resulta en un perfil de olor distintivo. A diferencia del sebo facial, que está expuesto a condiciones ambientales externas como la humedad y la contaminación del aire, el cerumen permanece relativamente libre de contaminación, lo que lo convierte en un medio de prueba confiable. Para estudiar esto, los investigadores recolectaron muestras de cerumen mediante hisopado de los canales auditivos de 209 personas, incluidas 108 personas diagnosticadas con EP. Mediante cromatografía de gases y espectrometría de masas, identificaron cuatro COV que fueron significativamente diferentes en personas con párkinson: etilbenceno, 4-etiltolueno, pentanal y 2-pentadecil-1,3-dioxolano. Estos COV emergieron como posibles biomarcadores para la enfermedad.


Imagen: la cera para el oído podría ser un posible medio de detección para la enfermedad de Parkinson (foto cortesía de 123RF)

Con base en este conjunto de datos, el equipo desarrolló un sistema olfativo de inteligencia artificial (AIO) entrenado para detectar la EP mediante el análisis de los patrones de COV. En las pruebas, el modelo basado en AIO demostró una precisión del 94 % al distinguir entre muestras con y sin EP, según el informe de Química Analítica de la ACS. Su alta precisión resalta el potencial del sistema para la detección temprana, especialmente porque la prueba es no invasiva y económica. Esta nueva herramienta de cribado AIO podría servir como método diagnóstico de primera línea para detectar la EP en sus etapas iniciales, mucho antes de que aparezcan los síntomas tradicionales. Al permitir una intervención médica temprana, podría mejorar los resultados de la atención a largo plazo para los pacientes y agilizar el diagnóstico tanto en entornos clínicos como comunitarios.

“Este método es un experimento a pequeña escala, realizado en un solo centro en China”, afirmó el investigador Hao Dong, de la Universidad de Zhejiang. “El siguiente paso es realizar más investigaciones en diferentes etapas de la enfermedad, en múltiples centros de investigación y entre diversos grupos étnicos, para determinar si este método tiene mayor valor práctico”.


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