La bilirrubina del cordón umbilical predice la ictericia neonatal
Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 21 Nov 2017
Actualizado el 21 Nov 2017
La hiperbilirrubinemia es una de las causas más comunes de ingreso hospitalario en el período neonatal entre los recién nacidos a término en todos los entornos. La prevención de complicaciones graves depende del tratamiento temprano efectivo, pero la ictericia clínicamente significativa puede no desarrollarse sino hasta uno o más días después del parto.
La identificación de biomarcadores que pudieran ser medidos dentro de unas pocas horas después del nacimiento y pueden pronosticar de manera robusta la ictericia incipiente, representaría un avance significativo. La determinación de la bilirrubina en la sangre del cordón umbilical (UCB) en el momento del parto es práctica, económica y no invasiva. Podría integrarse fácilmente con la tendencia actual hacia la evaluación bioquímica rutinaria de la sangre del cordón umbilical practicada en muchos centros.
Los especialistas neonatales del Hospital de la Universidad de Homerton (Londres, Reino Unido) llevaron a cabo un análisis retrospectivo de los registros de bioquímica hospitalaria identificando los partos a término con la UCB arterial registrada (aUCB). Se revisaron las historias clínicas de los bebés para identificar a aquellos que desarrollaron hiperbilirrubinemia neonatal que requirió tratamiento de acuerdo con las directrices NICE del Reino Unido, con/sin una prueba de antiglobulina directa positiva (DAT). Durante el período de 9 meses, hubo 4.069 partos, en los que se realizó el análisis de sangre del cordón umbilical en 2.128 (52,2%). La unidad neonatal está equipada con un analizador de sangre total GEM 4000 (Werfen UK, Warrington, RU; http://uk.werfen.com), que proporciona automáticamente la determinación de la bilirrubina total en las muestras.
De 1.411 partos a término con una aUCB claramente registrada, 30 recién nacidos desarrollaron ictericia clínicamente significativa (2.7%), de los que ocho fueron DAT + ve (0.6%) principalmente debido a incompatibilidad ABO. La aUCB predijo fuertemente el desarrollo de ictericia DAT + ve, así como la ictericia por todas las causas. Sin embargo, este efecto fue críticamente dependiente del grupo sanguíneo materno. Entre los lactantes con riesgo de incompatibilidad ABO (grupos sanguíneos maternos O + ve/O-ve, 39,7%) se reforzó el valor predictivo de la aUCB para la ictericia por todas las causas. Entre las que no estaban en riesgo (grupo sanguíneo materno definido no O+ve/O-ve, 51.0%) la ictericia desapareció por completo. Un límite de 35 μmol/L para las madres con grupo sanguíneo O+ve/O-ve aumentó la probabilidad previa a la prueba de ictericia por todas las causas del 4% a una probabilidad posterior a la prueba del 30%.
Los autores concluyeron que para los bebés de madres con grupo sanguíneo O, la aUCB predice el desarrollo de ictericia neonatal. No hubo una utilidad evidente para los bebés de madres con otros grupos sanguíneos. La estimación de aUCB se debe considerar como una estrategia para la identificación temprana de aquellos en riesgo de ictericia hemolítica neonatal. El estudio fue publicado el 20 de septiembre de 2017 en la revista BMC Pediatrics.