Análisis del microbioma intestinal predice hospitalización en cirrosis
Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 30 Apr 2018
La cirrosis es una de las principales causas de mortalidad y gasto sanitario debido a hospitalizaciones en todo el mundo. Los productos bacterianos, como las endotoxinas, desempeñan un papel clave en el desarrollo de un medio proinflamatorio y la progresión de la enfermedad en cirrosis.Actualizado el 30 Apr 2018
Específicamente, el desarrollo de la encefalopatía hepática (HE) y la peritonitis bacteriana espontánea (SBP) tienen un fuerte origen en el intestino. Un creciente cuerpo de literatura ha vinculado los resultados del ADN microbiano intestinal con los resultados negativos en la cirrosis.
Científicos de la Universidad de la Mancomunidad de Virginia (Richmond, VA, EUA) y sus colegas, llevaron a cabo un estudio prospectivo de pacientes con cirrosis, definida mediante biopsia, características de descompensación, evidencia endoscópica o radiológica de varices o cirrosis en el entorno de la enfermedad hepática crónica. Se realizó la recolección de heces para ADN y ARN utilizando Parapak (Meridian Bioscience, Inc., Cincinnati, OH, EUA) y las heces se almacenaron en RNAlater hasta que se extrajeron finalmente.
Se usó el cebador 16S bacteriano inverso (1492R) para hacer el ADNc. Tanto el ADN como el ADNc se usaron en la reacción en cadena de la polimerasa (PCR) con cebadores bacterianos universales para las dos primeras regiones variables L27F y 355R. El ADN o el ADNc se amplificaron por PCR para la secuenciación usando la tecnología de Torrente Iónico (Thermo Fisher Scientific, Waltham, MA, EUA). Las muestras diluidas preparadas se separaron en un secuenciador capilar fluorescente, ABI 3130xl (Applied Biosystems, Foster City, CA, EUA).
El equipo incluyó 26 pacientes controles y 154 pacientes cirróticos, incluidos 54 infectados, 62 descompensados, 20 con disfunción renal y 18 tratados con rifaximina en el estudio. El análisis de ARN y ADN mostró diferentes taxones potencialmente patógenos pero una composición similar de taxones autóctonos. Treinta sujetos se sometieron al estudio de omeprazol, que demostró diferencias entre los cambios de ARN y ADN. Treinta y seis pacientes fueron hospitalizados en un plazo de 90 días. En el modelo de ARN, el Modelo para la puntuación de Enfermedad Hepática en Etapa Terminal (MELD, por sus siglas en inglés) y los Enterococcus fueron predictores independientes de hospitalizaciones, mientras que, en el modelo de ADN, el MELD fue predictivo y la Roseburia protectora. En ambos modelos, agregar microbiota sumó significativamente al puntaje MELD para predecir las hospitalizaciones.
Jasmohan Bajaj, MD, el autor principal del estudio, dijo: “Las hospitalizaciones de los pacientes con cirrosis son exorbitantemente caras. Cualquier cosa que nos ayude a predecir la probabilidad de hospitalización es mejor que el status quo. Una de las principales fuentes de inflamación en los pacientes con cirrosis o en las personas obesas son las bacterias patógenas, por lo que comenzamos a estudiar los microbios intestinales. Las personas con cirrosis que están hospitalizadas tienden a tener una escalada inflamatorio muy grande en su cuerpo debido a infecciones y otras fallas orgánicas”. El estudio fue publicado el 8 de marzo de 2018 en la revista JCI Insight.