Prueba ultrarrápida de líquido sinovial diagnostica osteoartritis y artritis reumatoide en 10 minutos
Actualizado el 06 May 2025
Los estudios indican que más del 50 % de las personas mayores de 65 años experimentan síntomas de osteoartritis, mientras que la artritis reumatoide es una enfermedad crónica grave que afecta aproximadamente a 1 de cada 100 personas a lo largo de su vida. Si bien la osteoartritis y la artritis reumatoide pueden parecer similares, tienen causas distintas y requieren tratamientos diferentes, por lo que un diagnóstico temprano y preciso es crucial. Tradicionalmente, el diagnóstico se ha basado en radiografías, resonancias magnéticas y análisis de sangre, todos ellos largos, costosos y no siempre precisos. Ahora, una nueva tecnología permite diagnosticar la osteoartritis y la artritis reumatoide en 10 minutos utilizando líquido sinovial producido en articulaciones humanas.
Un equipo de investigación del Instituto Coreano de Ciencia de Materiales (KIMS, Gyeongsangnam-do, Corea) y sus colaboradores se centraron en las diferencias en la composición de los metabolitos (subproductos de procesos químicos corporales) presentes en el líquido sinovial. Mediante el análisis de estas variaciones metabólicas, el equipo desarrolló una tecnología capaz de distinguir entre osteoartritis y artritis reumatoide en tan solo 10 minutos, a la vez que evaluaba la gravedad de la artritis reumatoide. Los investigadores emplearon la tecnología de Dispersión Raman Mejorada por Superficie (SERS), que amplifica las señales ópticas de las moléculas varios millones de veces. Esta técnica potencia las señales de las moléculas traza en el líquido sinovial y, combinada con análisis basados en IA y algoritmos matemáticos, puede detectar pequeñas sustancias responsables de la artritis.

Además, el equipo diseñó un método de diagnóstico rápido y sencillo utilizando un sensor hecho de una nanoestructura de oro con forma de erizo de mar sobre una superficie de papel con alta absorción de humedad, lo que permite una detección eficiente a través de fluidos corporales. En colaboración con sus socios de investigación, el equipo realizó pruebas con esta tecnología en 120 pacientes. Los resultados, publicados en la revista Small, demostraron que la tecnología podía diagnosticar y diferenciar la osteoartritis de la artritis reumatoide con una precisión superior al 94 %. Además, logró una precisión superior al 95 % al determinar la gravedad de la artritis reumatoide. Estos hallazgos muestran que esta tecnología no solo reduce significativamente el tiempo y el costo del diagnóstico de la artritis, sino que también garantiza un alto grado de precisión diagnóstica.
“Si esta tecnología se comercializa, no solo facilitará el diagnóstico, sino que también será muy útil para monitorear el progreso del tratamiento”, afirmó el Dr. Ho Sang Jung, investigador principal del KIMS. “También planeamos seguir ampliando nuestra investigación para abarcar una gama más amplia de enfermedades en el futuro”.