Prueba de sangre basada en genes predice recurrencia del cáncer de piel avanzado
Actualizado el 16 Apr 2025
El melanoma, una forma agresiva de cáncer de piel, se vuelve extremadamente difícil de tratar una vez que se propaga a otras partes del cuerpo. En pacientes con tumores de melanoma metastásicos que no se pueden extirpar quirúrgicamente o que se consideran irresecables, el tiempo de espera para determinar la eficacia de los tratamientos farmacológicos puede ser largo; normalmente se requieren tres meses antes de que una radiografía, una tomografía computarizada u otras pruebas diagnósticas revelen si el tumor está disminuyendo o creciendo. Los investigadores llevan mucho tiempo buscando métodos más eficaces para monitorizar la progresión del cáncer mediante análisis de sangre, también conocidos como biomarcadores, que pueden realizarse con mayor frecuencia, de forma más económica y cómoda que las exploraciones por imagen o las cirugías, ofreciendo una visión más clara del comportamiento de los tumores a lo largo del tiempo. Un biomarcador comúnmente utilizado en el melanoma, la lactato deshidrogenasa (LDH), no es muy eficaz, ya que sus niveles también pueden aumentar debido a afecciones no cancerosas como daño hepático y lesión ósea. Aunque otros tipos de cáncer, como el de próstata, mama y colon, tienen biomarcadores específicos, hasta ahora no se ha encontrado un biomarcador fiable para el melanoma. Un nuevo análisis de sangre que monitorea los fragmentos de ADN liberados por las células tumorales moribundas podría servir como un indicador temprano preciso del éxito del tratamiento en el melanoma avanzado, como se detalla en un estudio publicado en The Lancet Oncology.
El estudio, dirigido por investigadores de la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York (Nueva York, EUA), se centró en adultos con tumores de melanoma metastásicos que no se podían extirpar quirúrgicamente o eran irresecables. Los pacientes presentaron niveles indetectables de ADN tumoral circulante (ADNtc) tras cuatro semanas de tratamiento farmacológico. Los resultados mostraron que los pacientes con niveles indetectables de ADNtc vivieron casi el doble de tiempo sin progresión de la enfermedad en comparación con aquellos que continuaron mostrando niveles detectables de ADNtc. Los investigadores observaron que la intervención temprana podría salvar vidas, especialmente en una enfermedad de rápida progresión como el melanoma, y que los análisis de sangre que proporcionan información rápida podrían ser cruciales para las decisiones de tratamiento. Estudios previos del mismo equipo habían sugerido el ADNtc como un candidato prometedor, ya que este método se centra en las mutaciones genéticas comunes en las células del melanoma. A medida que estas células se descomponen, el ADN mutado se filtra al torrente sanguíneo, donde puede detectarse. Estudios previos más pequeños habían demostrado que este análisis de sangre superó a la LDH en la predicción de la recurrencia del melanoma y el seguimiento de la progresión de varios tipos de cáncer.

Este estudio, realizado a lo largo de dos años, representa el análisis más amplio hasta la fecha sobre el uso del ADNtc como herramienta para la detección del cáncer de piel. Los investigadores analizaron muestras de sangre de dos ensayos clínicos fundamentales con 383 participantes de EUA, Europa y Australia, todos ellos en tratamiento con dabrafenib y trametinib para tumores de melanoma irresecables con mutaciones en el gen BRAF, presente en aproximadamente el 50 % de los pacientes con melanoma. El equipo midió los niveles de ADNtc antes del tratamiento y un mes después de iniciarlo. Se realizaron tomografías computarizadas periódicas para un seguimiento adicional durante el ensayo.
Un hallazgo clave del estudio fue que los pacientes con 64 o menos copias de ADNtc por mililitro de sangre antes de comenzar el tratamiento tendían a tener respuestas favorables a la terapia, sobreviviendo casi tres años en promedio. Por el contrario, los pacientes con niveles más altos de ADNtc tuvieron resultados de supervivencia significativamente peores, viviendo poco más de un año. Los investigadores encontraron que el análisis de sangre era altamente confiable, con ADNtc detectado en el 93 % de los pacientes. Estos resultados también se confirmaron en un segundo grupo de pacientes de otro ensayo clínico con estadios de enfermedad similares. Aunque el análisis de sangre aún no ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), los investigadores creen que la evidencia de su precisión y potencial para el uso clínico respalda la necesidad de una futura aprobación. A continuación, el equipo planea evaluar el enfoque del ADNtc en pacientes con melanoma en estadio temprano.
“Aunque esta prueba genética se centra en tumores con mutaciones en BRAFV600, creemos que será igualmente útil para melanomas con otras mutaciones, como defectos en los genes NRAS y TERT, que también mutan comúnmente en esta enfermedad”, afirmó la autora principal del estudio, la Dra. Mahrukh Syeda. “En última instancia, nos gustaría que esta prueba se utilizara de forma rutinaria en la clínica para ayudar a orientar las decisiones de tratamiento”.