Una huella digital del líquido cefalorraquídeo diferencia las infecciones de las enfermedades cerebrales

Por el equipo editorial de LabMedica en español
Actualizado el 19 Nov 2018
Se ha demostrado que los análisis de citoquinas permiten diferenciar a los pacientes con infecciones de otras enfermedades del cerebro y pueden convertirse en una valiosa herramienta de diagnóstico, especialmente en bebés y niños pequeños.

Las pruebas de laboratorio actuales del líquido cefalorraquídeo (LCR) no discriminan sistemáticamente entre diferentes estados de enfermedad del sistema nervioso central (SNC). La capacidad de diferenciar rápidamente las infecciones del SNC de otros trastornos del cerebro y la médula espinal que comparten una presentación clínica similar es un requisito diagnóstico urgente. Se han sugerido nuevos métodos que se centran en aspectos de la biología de la enfermedad, como los perfiles de respuesta inmune que pueden tener atributos específicos de estímulo.

Imagen: Cuatro viales de líquido cefalorraquídeo humano de apariencia normal, recolectados mediante punción lumbar (Fotografía cortesía de Wikimedia Commons).

En este sentido, los investigadores de la Universidad Thomas Jefferson (Filadelfia, Pensilvania, EUA) realizaron un estudio preliminar, de prueba de concepto, que utilizó un ELISA múltiplex para medir los niveles de citoquinas del LCR en diversos trastornos del SNC (infecciones, enfermedades autoinmunes/desmielinizantes, linfomas y gliomas) para determinar la utilidad potencial de los patrones de citoquinas en la diferenciación de las infecciones del SNC de otras enfermedades del SNC.

En un análisis retrospectivo, los investigadores evaluaron muestras recolectadas de 43 pacientes a quienes les habían realizado punciones lumbares durante sus estancias en el hospital. Las muestras de LCR fueron examinadas para detectar 41 citoquinas diferentes.

El análisis estadístico reveló que los pacientes con infección confirmada del sistema nervioso central tenían una huella dactilar de citoquina diferente de aquellos a quienes les habían confirmado tumores o enfermedad autoinmune. Además, dentro de la cohorte de pacientes con infecciones del sistema nervioso central, la huella dactilar de citoquinas del LCR fue diferente en los casos de infección viral en comparación con aquellos con patógenos no virales, como bacterias u hongos.

“Tenemos muchas pruebas para hacer diagnósticos, pero las que indican de manera concluyente que se trata de una infección se pueden demorar más tiempo del que nos gustaría, especialmente en casos de meningitis o encefalitis infantil”, dijo el autor principal, el Dr. Mark Curtis, profesor asociado de patología, anatomía y biología celular en la Universidad Thomas Jefferson. “Una vez confirmado con una investigación adicional, nuestra prueba podría proporcionar una primera forma, rápida y menos invasiva de ver lo que sucede en el cerebro y guiar el tratamiento o las pruebas adicionales”.

“Los bebés y los niños pequeños tienen un riesgo especialmente alto de meningitis y encefalitis y las secuelas relacionadas, a menudo graves”, dijo el Dr. Curtis. “Ser capaces de identificar rápidamente un trastorno del sistema nervioso central como infeccioso puede ser crucial en la respuesta rápida. Además, la prueba podría diferenciar las infecciones virales de las no virales, una distinción que podría ahorrarle a un niño con una infección viral un curso innecesario de antibióticos, y adaptar la atención a los antivirales y las medidas de apoyo según sea necesario. De cara al futuro, nuestro objetivo es validar formalmente nuestros hallazgos con un tamaño de muestra más grande que incluya tanto a adultos como a niños para un uso futuro en el ámbito clínico”.

El análisis de citoquinas del LCR para la detección de enfermedades se describió en la edición en línea del 31 de octubre de 2018 de la revista PLOS ONE.

Enlace relacionado:
Universidad Thomas Jefferson


Últimas Diagnóstico Molecular noticias